“Reducir las emisiones de CO2 del transporte disminuye las necesidades de inversión en infraestructuras básicas de transporte”, es el principal mensaje del informe ITF Perspectivas del Transporte 2023 del Foro Internacional del Transporte de la OCDE, presentado el 24 de mayo en la Cumbre mundial de ministros de transporte en Leipzig, Alemania.

Todas las medidas de descarbonización del transporte que están en vigor reducirán las emisiones mundiales de CO2 en sólo un 3% para 2050, por lo que no llegaría por un amplio margen a la disminución necesaria para alcanzar el cambio climático. Y, si se intensifican y aceleran las medidas aún se pueden reducir sus emisiones de CO2 en aproximadamente un 80% en los próximos 25 años (en comparación con 2019), apunta el informe.

"Será absolutamente esencial ampliar rápidamente las tecnologías y los combustibles competitivos en costos para transportar personas y mercancías con muchas, muchas menos emisiones. Podemos hacer todo esto si tomamos medidas más decisivas ahora", dijo el secretario general de la ITF, Young Tae Kim.

El transporte de mercancías se duplicará aproximadamente en los próximos 25 años si seguimos por el camino actual, y el de pasajeros crecerá un 79%. Por lo que es necesario contar con inversiones en infraestructuras de transporte básicas -como líneas ferroviarias, carreteras o puertos- para satisfacer la demanda futura. 

Recomendaciones

El informe entrega cinco recomendaciones a los responsables políticos: Desarrollar estrategias globales para la movilidad y las infraestructuras del futuro; acelerar la transición hacia flotas de vehículos limpios; aplicar políticas de cambio de modo de transporte y de gestión de la demanda allí donde sean más eficaces; evaluar políticas, teniendo en cuenta los beneficios adicionales para las zonas urbanas y, por último, reformar la fiscalidad de los automóviles para reflejar los costos externos de las nuevas flotas.